Perseo y Medusa

Según el mito griego, Perseo era un semidiós, hijo de Zeus y de la mortal Dánae. Polidectes, que se había enamorado de Dánae, pensó que Perseo estorbaba a sus planes y amenazó a este con cortar la cabeza de su madre si no le traía la cabeza de la Medusa, una de las tres gorgonas que habitaban en la isla de Sérifos.

Los dioses decidieron ayudar a Perseo en su difícil empresa, Atenea le dio un escudo que era un espejo, Hades le dio un casco que lo haría invisible cuando lo usara, Hermes le dio unas sandalias que se convertirían en alas para volar, y Hefesto le dio una espada indestructible.